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lunes, 7 de julio de 2008

Chrysler crossfire

Con este atractivo roadster, Chrysler intenta conservar el código genético característico de aquellos pura raza estadounidenses de la década del 70 y, sin duda, lo ha logrado. El Crossfire es construido en Alemania por el prestigioso carrocera Karman, con más de cien anos de experiencia en diseño y fabricación de modelos convertibles.


Para conseguir la estilizada y ligera línea de este roadster, se utilizaron materiales nada comunes en la fabricación de automóviles: aluminio en la carrocería y fibra de carbono en el chasis. La capota de lona con luneta de cristal incorpora, de serie, un accionamiento electro-hidráulico completamente automático, que permite abrir el techo en sólo veinte segundos. Su motor es de origen Mercedes Benz, un potente V6 de 3.2 litros que le otorgan 218 CV.


Cuales son las características del Chrysler crossfire


Con detalles cromados en el panel de instrumentos y el volante, el interior exhibe una imagen distinguida. Los asientos son de competición con acabado de cuero natural, calefaccionados y, para fanáticos, llevan el emblema alado de Chrysler en los apoyacabezas.


Vel. max.: 246 km/h

Aceleración 0-100: 12 segundos

Transmisión: manual 6 velocidades

Consumo mixto: 11.3 litros c/100 km

Capacidad del maletero: 190 lítros

viernes, 4 de julio de 2008

Nuevo Volkswagen scirocco

El diseñador de moda por entonces, Giorgetto Giugiaro, permitió a Volkswagen lanzar en 1974 un modelo verdaderamente deseable. Se llamaba Scirocco, se fabricaba en las instalaciones de Karmann y era un coupé deportivo pensado para vencer la nostalgia del Karmann Ghia. Era decididamente moderno, como lo fue el primer Golf, también de ItalDesign-Giugiaro, y llegó tras la gran crisis energética de los primeros setenta, que se remató a finales de la década con un barril de petróleo a 80 dólares. No sería la última. En los noventa se produjo la convulsión siguiente. A Europa se le congeló la sonrisa en esos días, y un dignísimo sucesor del Scirocco, el Corrado, se fue discretamente en 1995, cien mil unidades después, por donde el primer Scirocco había venido cantan­do veinte años antes.


De todo aquello queda un nombre de viento, Scirocco, que Volkswagen utiliza ahora para lanzar la tercera generación del modelo. Vuelve a ser un Golf coupé, de estilo suficientemente diferencia­do, y llega coincidiendo de nuevo con máximos históricos en el precio de los combustibles. Tiene a su favor una silueta atractiva, buenos motores para elegir, un equipamiento muy amplio, un abanico de precios competitivo... y la victoria que ha conquistado en su pre-estreno, las 24 Horas de Nürburgring. El habitáculo, excesivamente parecido al de cualquier otro coche de la marca, es algo más ancho y bajo que el de un Golf. En cambio las pla­zas traseras, diseñadas para dos ocupantes, no son muy amplias, ni el maletero demasiado capaz. De hecho, con 292 litros de capacidad homologada, es solo un poco mayor que el de un Volvo C30.


Cuales son las características del nuevo Volkswagen scirocco


El último Scirocco juega como ningún otro la carta del precio-equipamiento y hay versiones que aventajan en precio a cualquiera de sus rivales. Puede tener motores TSI de 1,4 y 2,0 litros (160-200 CV) y 2,0 litros TDI de 140 CV. Con el motor TSI/200 (28.580 euros, 30.300 con cambio DSG) es más asequible y potente que cualquiera de sus rivales, aunque Hyundai mantiene en catálogo su brillante Coupé V6 de 2,7 litros y 165 CV, el más barato de todos. Un Alfa GT 2.0 JTS con acabado equivalente cuesta 29.000 euros y tiene 165 CV; no conviene olvidar que los Alfa GT más satisfactorios tienen motor Diesel, alternativa de adquisición más costosa. Un Volvo C30 de cinco cilindros, 2,4 litros y 170 CV, cuesta algo más de 29.000 euros. El Scirocco corre más y gasta menos que cualquiera de los modelos equiparables, pese a tener el único motor turboalimentado; también es más pequeño y ligera, con la excepción del C30, que presenta aún mayores limitaciones de habitabilidad que el Scirocco... y pesa casi tanto como el Coupé de Hyundai.


El funcionamiento del Scirocco es muy satis­factorio, en cualquiera de sus configuraciones mecánicas, con un excelente tacto de dirección y un eje trasero muy "vivo", que ayuda a redondear las curvas con una agilidad sorprendente. Es casi tan refinado como el Alfa GT, cuyo chasis es uno de los más afinados de su clase y su control electrónico de estabilidad (VDC) uno de los menos molestos para el conductor experto. En el Scirocco se puede instalar con carácter opcional una suspensión variable "adaptativa" (DCC), que por 910 euros añade la posibilidad de seleccionar sobre la marcha tres de amortiguación: normal, confort y sport. En honor a la verdad, el Scirocco TSI de 200 CV no necesita este accesorio para ser uno de los mejores coupés de su tamaño en lo concerniente a estabilidad y precisión de guía.


Si la segunda generación del Scirocco (que se llamó Corrado) estuvo entre nosotros el tiempo justo, la tercera generación llega con vocación de permanecer. Los aficionados, y la crisis, tienen la palabra.