Los fabricantes de automóviles parecen estar dispuestos a cambiar sus viejas perspectivas sobre los vehículos alimentados por electricidad y preferir a aquellos que tengan celdas de combustible. Y se les están uniendo sus socios tradicionales: las gasolineras.
Fiebre por celdas de combustible
Así, Ford y DaimlerChrysler, junto con Sistemas Ballard Power -líder en el desarrollo de celdas de combustible- anunciaron que proveerán a California de más de 40 autos y autobuses alimentados con celdas de combustible entre 2000 y el 2003. Shell, ARCO y Texaco anunciaron que trabajarían para ayudar al desarrollo de la tecnología y la infraestructura necesarias para emplear metanol y gasolina como fuente del combustible de hidrógeno.
Además, Ford presentó un sedán del tamaño del Contour, el P2000, alimentado por celdas de combustible de hidrógeno. DaimlerChrysler ha demostrado las habilidades de su NECAR4.
Entre tanto, BMW y Delphi Automotive están desarrollando una celda de combustible para reemplazar al alternador actual, ayudar a ahorrar peso y mejorar la eficiencia del motor de combustión interna.
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